Elena C. es un mal recuerdo para decenas de comunidades de vecinos de Valencia y municipios del área metropolitana. El Colegio de Administradores de Fincas ha recibido más de una treintena de reclamaciones contra la mujer que un día manejó las cuentas de numerosos inmuebles.

Otras, en cambio, ya han dado el paso de acudir a los tribunales. Un juzgado de Catarroja ha imputado a la administradora en una causa abierta por apropiación indebida. Fuentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) confirmaron que ya se han recibido otras seis denuncias por estos hechos, todas remitidas desde órganos judiciales de Valencia. Otras fuentes del caso apuntan que la cifra de afectados que han emprendido la vía penal supera en estos momentos la veintena.

Calcular la magnitud del desfalco resulta imposible. Pero no se trata de un caso menor, tal y como aseguran desde la institución colegial. Por ejemplo, una de las denuncias que se ha presentado en el juzgado cuantifica en unos 30.000 euros la cantidad que se ha distraído de su patrimonio. Esta comunidad detectó pagos del recibo de la luz de la oficina de la propia administradora, seguros de otra comunidad y otros cargos por conceptos ajenos a su finca.

En las comunidades perjudicadas sospechan cuál puede haber sido el destino final de estas cantidades. La imputada era -o quizá sigue siéndolo- una gran aficionada al póker. Ha participado en varios torneos presenciales de una conocida modalidad de este juego. Basta una búsqueda en Google para conocer su afición a los naipes.

Fuentes cercanas al caso comentaron una presunta adicción de la ahora imputada a este tipo de juegos. Incluso que este factor pudiera jugar a su favor a la hora de buscar atenuantes.

La mujer todavía no ha ido a declarar porque no se le ha podido notificar la citación, según confirmaron desde el Tribunal Superior de Justicia. Se ha requerido para que se averigüe su paradero. Tampoco está decidido qué juzgado instruirá finalmente el asunto. De momento recae en Catarroja, pero no se descarta que finalmente desemboque en Valencia, donde tenía su despacho.

Complejo en el Perellonet

Una de las primeras comunidades que detectó las irregularidades en la gestión de Elena C. fue una finca de apartamentos del Perellonet. En aquel caso, los residentes disponían de una cuenta bastante holgada porque iban a realizar unas obras en el complejo. Algunos vecinos detectaron entradas y salidas de dinero, que se registraban en el mismo día. Hasta que, al final, no se produjo el reintegro. Finalmente devolvió la cantidad tras ser advertida de que le iban a denunciar.

La preocupación en el Colegio de Administradores de Fincas por este asunto es lógica. La avalancha de reclamaciones se produce a partir de la primavera del pasado año, según confirmó el presidente, José Sales. El organismo abrió un expediente disciplinario a la colegiada y, de momento, se le ha inhabilitado a la espera de un pronunciamiento judicial. También enviaron toda la documentación a la Fiscalía Provincial para que abrieran una investigación. Esta deberá archivarse y remitirse al juzgado ya que la causa se encuentra judicializada.

Sales defendió su compromiso en terminar con este tipo de comportamientos. «No miramos para otro lado. Somos los primeros interesados en profesionales honestos, y así es en un porcentaje cercano al 100%. El presidente informó que el colegio dispone de un seguro para cubrir este tipo de actuaciones.

FUENTE: LAS PROVINCIAS