Benicalap y Rascanya serán los distritos con mayor crecimiento de población en 15 años

Benicalap y Rascanya serán los distritos con mayor crecimiento de población en los próximos 15 años, ganando más de un 2 % de habitantes, (3.192 residentes en el primer caso y 2.962 en el segundo). Esa es la proyección del estudio sociodemográfico realizado por el Ayuntamiento de València que acompaña el plan especial de Cabanyal y que avanza cómo será la València de 2035. Mientras los distritos de Benicalap, Ciutat Fallera, Rascanya, Orriols y Torrefiel ganarán población, los distritos de Eixample, Extramurs, Pla del Real y Poblats Marítims la perderán. El coste de la viviendas y el encarecimiento de los alquileres estarían detrás de la fuga de vecinos de estos barrios, donde también desciende el número de migraciones, esto es, de población que se muda a los barrios del centro, l’Eixample y Poblats Marítims.

El mayor descenso de cambios de domicilio lo registrarán los barrios del centro (Carmen, Seu, Pilar, Mercat y Sant Francesc). El estudio sociodemográfico prevé un descenso continuado de altas de domiciliaciones en estos barrios, a pesar de las medidas previstas en el nuevo plan de Ciutat Vella para frenar la proliferación de apartamentos turísticos y la gentrificación. Si en 2020 hubo 167 bajas, en 2024 se esperan 170. También evolucionará hacia un barrio menos residencial los distritos de Camins al Grao y Algirós, cada vez más influenciados, como Benimaclet, por los pisos de estudiantes que copan la oferta dada la cercanía a los campus universitarios.

En Benimaclet, habrá 76 bajas vecinos domiciliados en el barrio en 2034.

El estudio sociodemográfico anuncia que la València de 2035 tendrá 809.000 habitantes, un 1% más que en 2020, fecha de referencia del estudio, que se centra especialmente en la evolución de la población en edad escolar con objeto de servir de base para la planificación de dotaciones educativas, guarderías, colegios e institutos. En este sentido anuncia el informe que la población de 0 a 2 años crecerá porcentualmente un 2,4%, pasando de 17.612 a 18.036, mientras que la población de 3 a 11 años registrará un notable descenso, del 17,5%, pasando de 64.618 a 53.339. También habrá en 2035 un 16% menos de población de 12 a 18 años, que pasará de los 54.857 de 2020 a 46.090.

El estudio ha tenido en cuenta la influencia de la pandemia del coronavirus en la ciudad que provocó un cierto éxodo hacia barrios de la periferia y poblaciones del área metropolitana con viviendas más amplias para aliviar el obligado confinamiento. Benimàmet que no ha parado de ganar población desde 2020, con los mayores porcentajes de crecimiento, superiores al 4%, en 2035 contará con 16.587 residentes.

El estudio de población realizado por el Ayuntamiento de València evidencia la influencia de los ciclos económicos en la cuestión demográfica. El ciclo expansivo de 2001 a 2008 trajo un importante crecimiento a la ciudad debido a la inmigración. Por contra, la crisis de 2008 de 2018 tuvo un efecto negativo en el total de poblaciones, con un descenso continuado hasta alcanzar un mínimo en 2015. Desde entonces, se ha registrado un proceso suave de recuperación que ha incrementado los totales poblaciones y sobre todo los fenómenos demográficos que tendrá la crisis asociada a la Covid-19, cuyo efecto se ha incluido en el informe aunque, apuntan los autores de las proyecciones, «será necesario reevaluar». Las estimaciones tendrán un mayor grado de incertidumbre en los ámbitos territoriales con menos población, como es el caso de las pedanías, donde el margen de error estadístico puede ser mayor.